El Comercio 02/01/2014

 

 

 

 

 

 

Emilio Llamedo Iglesias, el hijo del que fuera presidente del Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella recientemente fallecido, se llevó ayer el triunfo en la San Silvestre de Cangas de Onís. Con un tiempo de 16:36, el parragués completó el recorrido que contaba con 5.300 metros de distancia. Llamedo corrió bajo las siglas de la Sociedad Cultural y Deportiva de Ribadesella. Tras él cruzaron la línea de meta, instalada frente al Ayuntamiento cangués, Emlio Prada Blanco y Víctor Fernández Diez, corredor este último cangués y militante del club Piloña Deporte, con tiempos de 16:54 y 16:58 minutos, respectivamente.

Entre las féminas, las campeonas absolutas fueron tres canguesas. Por este orden, completaron el circuito como las más veloces de la San Silvestre Vanesa Ibaseta Canga, del club Cangas de Onís Atletismo, Monserrat del Coro Alonso y Blanca Prada Blanco, con tiempos de 23:26, 23:46 y 25:02 minutos.

Entre los primeros puestos de la competición que finaliza el año también se lograron colar los piragüistas Luis Amado Pérez, que cruzó la meta en quinto lugar, y Milín Llamedo, que llegó el octavo.

La carrera canguesa no admitía más de 300 participantes, pero finalmente fueron casi 400 los que se disputaron la prueba reina. Además de la carrera popular, que arrancó a las 17.30 horas, también hubo espacio para los chupetines y las categorías inferiores, que comenzaron a correr desde las 15.30 horas. La sorpresa de la edición la protagonizó el pequeño cangués Yago Gutiérrez, que con tan sólo 5 años logró completar el circuito adulto, de 5,3 kilómetros, y recibió un premio especial por parte de la organización. La San Silvestre canguesa contaba además con el sistema de control de tiempos mediante chip electrónico (championchipnorte). Estuvo organizada un año más por el Club Cangas de Onís Atletismo, que lamentó nuevamente la presencia de la persistente lluvia, que lleva varias ediciones empañando la competición.

 

 

 

 
La Nueva España 02/01/2014